OUTSOURCING ¿CÓMO ME AFECTA?

Hemos estado escuchando ya desde hace tiempo sobre la figura del outsourcing, tanto desde el punto de vista de emprendedores o empresarios, como desde la perspectiva de los “Godínez”; sin embargo, en los últimos meses, creemos que ha sido mucho más mencionado el término debido a la publicidad que se le ha dado al combate a la subcontratación ilegal del nuevo gobierno federal.

Para empezar, ¿Qué es el outsourcing?

Conforme a la Ley Federal del Trabajo, es (valga la redundancia) el trabajo por medio del cual un patrón ejecuta obras o presta servicios con sus trabajadores a favor de un contratante, quien fija las tareas de ese contratista y lo supervisa.

Es decir que “A” que tiene un negocio de servicios de limpieza, llega a un acuerdo con “B” que tiene una empresa de fabricación de calcetines para que éste último reciba dichos servicios de limpieza, y para esto, “A” asigna a ciertos empleados para que cumplan con este fin en las oficinas de “B”

Claro que existen ciertas condiciones que cumplir en este esquema de trabajo:

1. No se pueden abarcar tooodas las actividades de la empresa (es decir, como patrón no puedes tener a todos tus empleados subcontratados)

2. Debe de ser únicamente para un trabajo especializado (algo que tu como empresa no tengas como actividad principal y por ello necesites de los servicios de alguien más)

3. Que no sean tareas iguales o similares a las que realizan el resto de tus trabajadores.

¿No cumples con estos requisitos? Bien, entonces se te considera a ti también, como patrón para todititas las de la ley.

Y bien… entonces, si es TAN común que ejemplos como el anterior sucedan en las empresas como las conocemos, ¿Cuál es el problema en México?

El problema no es ni siquiera la existencia de esta figura, sino cómo ha sido utilizada. Se oye tanto sobre este tema en los medios porque muchas empresas no han utilizado el esquema de la subcontratación para simplemente contratar servicios por fuera y enfocarse en sus actividades principales (Como en el ejemplo simple de los sujetos “A” y “B” y los servicios de limpieza mencionado arriba); sino que se ha utilizado para incumplir con obligaciones laborales y de seguridad social, al registrar a los empleados con un salario menor al real, práctica que no solo afecta al trabajador, sino que también repercute en los ingresos para sostener el sistema de seguridad social.

¿Alguna vez se preguntan por qué no hay buenos servicios públicos de salud? O ¿Por qué dicen que los millenials no tendremos una pensión digna en la vejez (si llegamos a tener si quiera una pensión)? Bueno, la respuesta si es “la corrupción”- como diría AMLO – pero si quieren una razón más concreta, podría ser ésta.

Ok, ok… y si yo soy el patrón ¿Por qué me afecta?

1. Estas contribuyendo al deterioro (aún más) de los servicios de salud en nuestro país, pensiones y vivienda.

En caso de que te valga el bienestar del país y de tus trabajadores, también hay afectaciones económicas para tu bolsillo, como las siguientes:

1. Corres mayor riesgo de que un trabajador te demande y ¡OJO! porque no importa si te firmaron 10 hojas en las que dicen que están de acuerdo con el esquema ilegal o que te juraran que les valen sus prestaciones laborales… Recuerda que los derechos de los trabajadores son IRRENUNCIABLES.

2. Obviamente una revisión fiscal puede tocar tu puerta en cualquier momento.

3. Multas que pueden ir desde 250 hasta 5000 veces la UMA.

¿Y si soy godín? ¿En qué me afecta si yo recibo felizmente dinero a mi cuenta cada quince días?

1. Tendrías una pensión (si te toca) ridícula para “sobrevivir” en tu vejez.

2. Podrías no adquirir un crédito de INFONAVIT para adquirir una casa.

3. No tendrías acceso a servicios de salud de calidad, entre otros servicios.

4. Olvídate de recibir utilidades de la empresa en la que trabajas.

Por lo anterior, te recomendamos revises tu esquema de subcontratación laboral, si es que es el caso y esperamos que te sea de utilidad esta breve explicación. Habiendo dicho esto, nos retiraremos lentamente…